Sorpresa
- Fernando Salazar
- 14 feb 2018
- 1 Min. de lectura

El pequeño Timothy abrió los ojos en medio de la noche. Como sabía bien, Burton, su gato, estaba encima de él, mirándolo fijamente a centímetros de su cara. "¿Ya? Dormir." Dicho ésto, se volteó. El felino bajó de la cama, y siguió su ronda nocturna. Vohorton Cazapesadillas había exterminado a una verdadera legión de arañas de las sombras, que surgieron en una esquina del cuarto de Timmy. Su estancia en esta casa, había sido muy atareada. Los seres de las sombras tenían un portal franco en esta locación, pero él había cumplido con creces su misión. Los mantendría a raya, todo el tiempo que fuese necesario. No sólo porque se le encomendó dicha tarea, sino porque le había tomado cariño a la familia, sobre todo, al niño diferente; los humanos susurraban en ausencia de Timmy, algo sobre "retardo severo", pero a Vohorton no le parecía tan diferente a los demás. Volvió al cuarto de Tim, quien ya roncaba levemente. "¡Qué inocentes son los humanos! ¡No saben en medio de qué mundos viven! ¡Bendita ignorancia!", maulló suavemente el gato. "No igno... igno... nocente"; soy Tim". El gato soltó una disculpa indiferente al niño y se alejó. Tres pasos después, se congeló, con el pelo totalmente erizado. ¿Desde cuándo un humano podía entender a los Gatos de Ultherion?
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